Se cumplen la tradiciones. Se dan cumplimiento a nuestros Estatutos. Como cada primera semana de Cuaresma el Señor de Linares nos llama, nos invita a reflexionar con El en sus palabras y en nuestras obras. Nos abre las puertas de su Casa y nos ofrece el calor de su Hogar. Nos habla cara a cara, sin tapujos, directamente, como hace siempre. No rechazemos esta invitación a conversar con Él y acudamos a la cita más importante.
Y este año ¡¡por fin!! presidiendo el Templo de San Francisco en su Altar de Quinario.
BUENAS FOTOS DIEGO
ResponderEliminarun saludo