ENTREVISTA CRUZ DE GUÍA 2012

Les dejamos con la entrevista publicada en la edición de este año del Boletín anual de la Agrupación de Cofradías, Cruz de Guía, realizada a Diego Reche costalero de nuestra Cuadrilla.

¿De que hermandades eres y en que cofradías sales? En Linares soy hermano de la Entrada en Jerusalen, Columna y Nazareno. También soy hermano de la Amargura de Sevilla. Actualmente en Semana Santa salgo en mi hermandad del Nazareno, en el palio del Mayor Dolor, y en la Resurrección, también en el palio del Amor Hermoso. Si Dios lo permite este año debutaré en la Vera+Cruz. En cuanto a hermandades de gloria actualmente salgo en paso de la Virgen del Carmen, de Andujar, y en el paso de la Virgen del Rosario, de La Carolina.

¿Qué cargos has desempeñado en tu vida cofrade? En la Hermandad del Nazareno he desempeñado los cargos de Vocal y Hermano clavero durante el mandato de D. Ramón Martín Córdoba, en la Agrupación de Hermandades y Cofradías desempeñé los cargos de Vicesecretario primero y de Secretario después, durante las presidencias de D. Ramón Martín Aguayo y de Dª. Francisca Jiménez, y también fue responsable desde el año 2001 hasta el 2006 del libro “Cruz de Guía” que publica la Agrupación de Hermandades y Cofradías. En la Hermandad de la Columna fui Prioste 2º en el mandato de D. Antonio Murillo y en el mandato de D. Angel Tirado he sido Vicehermano Mayor y actualmente Diputado de Cultos.

¿Cómo ves el mundo de las Cofradías? Ahora mismo lo veo un poco extraño. Me explico, ahora hay gran cantidad de gente joven que se acerca a las hermandades, en las bandas, en los pasos… pero sin embargo en prácticamente todas las hermandades se nota cada vez más la falta de gente que quiera tomar responsabilidades dentro de su cofradía, falta gente que quiera dedicar su tiempo a trabajar por su hermandad. Las hermandades necesitan de sus hermanos no solo para trabajar en ferias, cruces de mayo y demás. Las hermandades tiene un trabajo diario que también hay que realizar para que la cofradía siga avanzando, y en eso si se echa en falta la presencia de los hermanos que hace que los que si van a trabajar habitualmente cada vez tengan que dedicar más y más tiempo. También hay una separación alarmante de las Hermandades con la Iglesia, a las hermandades les cuesta mucho integrar a los hermanos en la vida de su comunidad parroquial, como si solo nos interesara mas la parte folclórica que la religiosa. Hablo en general, hay casos de cofradías que si están integradas en sus parroquias de una forma eficiente. Tampoco debemos olvidar la actual crisis económica que si está afectando de forma impactante en algunas corporaciones, y por eso cada vez las hermandades hacen más esfuerzos para temas de caridad, esfuerzos que lógicamente no se ven pero que si me gustaría destacar.

¿Qué esperas de esta Semana Santa de 2012? Espero lo mismo que espero de cada Semana Santa, vivirla muy intensamente. Son solo 8 días y hay que vivirlos intensamente. Por suerte cada año estos días los disfruto cada vez más y siempre cada año puedo disfrutar de experiencias nuevas y vivencias diferentes que me hacen vivir cada Semana Santa de forma distinta cada vez.

¿Cómo fue tu primer año como costalero de María Stma. Del Mayor Dolor? ¿Qué te llevo a ser costalero de ese palio? Yo vivía en la calle Pontón y de muy pequeño he tenido la suerte de ver al Nazareno pasar por la puerta de mi casa, y aunque pasaban otras hermandades, la Hermandad del Nazareno fue dejando huella cada año. A finales de los años ochenta, creo que en el año 1988 la Hermandad del Nazareno abrió su Casa de Hermandad a escasos metros de la casa de mis padres y cuando vi el cartel de que se buscaban costaleros para El Nazareno pues fui a apuntarme. Y aunque me apunte para el paso de cristo, como ese año no salió fui a parar al paso de palio y de ahí ya no quise moverme. Era 1989 y apenas tenía 15 años. Ahora lo piensa y es una locura. De mi primer año recuerdo poco, estábamos 2 cuadrillas y aunque trabajé relativamente poco tiempo si terminé bastante cansado, era una época en la que técnica brillaba por su ausencia y los pasos se llevaban mas con el corazón que con la cabeza. Cuando llegue a mi casa dije que ya no volvería más, que eso no era para mi.

¿Qué cambiarias o quitarías de estos años? Me gustaría haber salido en aquellos años teniendo el conocimiento del oficio que tenemos ahora. Hubiésemos disfrutado mucho esos primeros años en los que, como ya digo, se llevaban los pasos más con el corazón que con la cabeza.

¿Qué día es más especial de la Semana Santa? Sin duda la Madrugá. Todos los días tienen sus momentos que los hacen especiales, pero la Madrugá es diferente. Cuando salgo de mi casa hacia la Casa de Hermandad ya el aire se nota diferente, el ambiente cambia, se empiezan a ver los primeros penitentes nazarenos y ya se empieza a acelerar el pulso, se agolpan las sensaciones, nos comenzamos a juntar los nazarenos y sin decir nada notamos que las siguientes horas son horas donde van a ocurrir cosas importantes…

¿Tu capataz? Carlos Chamorro, mi primer capataz y el que me enseño, no solo a mi si no a toda una generación de nazarenos, además de ser costaleros a ser cofrades, nos inculcó el concepto de hermandad y que lo mejor que podemos hacer es trabajar por ella. Nos enseño a sentirnos nazarenos por encima de todo.

¿Cómo ves el mundo de los hombres de negro en Linares? Los capataces tiene una responsabilidad muy grande dadas las características del trabajo de los costaleros. Afortunadamente hay capataces que se preocupan mucho por hacer bien su trabajo y aprender cada vez más, aunque también hay otros, los menos afortunadamente, que su única preocupación es salir en las fotos dándole al martillo. Del correcto trabajo del capataz depende también en gran medida el futuro de los costaleros en Linares. En realidad todos, tanto costaleros como capataces, tenemos mucho que aprender y tenemos que tener interés por seguir aprendiendo.

Una calle durante la Madrugá. No suelo tener preferencia por ninguna calle en concreto, viniendo Ella con nosotros cualquier calle es buena. Si recuerdo con cariño calles por donde ya no pasamos, como Argüelles o Cánovas del Castillo.

Un compañero debajo del paso. Rafa Martín Aguayo, porque son muchas Madrugás juntos y hemos vivido muchos buenos momentos y también muchos momentos difíciles de ir apretados con los kilos dando leña. Hemos estado juntos desde el primer día que entré en la cuadrilla hasta hoy y para mi es un puntal importante en la cuadrilla. Aunque en general la cuadrilla del Mayor Dolor es gente muy entregada, acostumbrados a los kilos y que no se arrugan con facilidad.

Una chicotá que recuerdes toda tu vida. Recuerdo muchas chicotás memorables, pero siempre me acuerdo especialmente de una chicotá de hace ya muchos años, año 96, o 97… no recuerdo bien, que la cuadrilla venía muy castigada del Paseo. Nosotros siempre teníamos la tradición de revirar desde Corredera Alta hasta Isaac Peral, en las Ocho Puertas, con “Amarguras” pero ese año Carlos Chamorro, el capataz, nos vio tan cansados que nos propuso revirar con una marcha más aliviada, para entrar con fuerza en Carrera Oficial. Ni que decir tiene que nosotros nos opusimos y “exigimos” nuestra marcha de “Amarguras” para revirar. Ese año yo iba en el zanco derecho de la trasera, y recuerdo esa chicotá con mucha intensidad. Empezamos a revirar justo al comenzar la marcha y durante la revirá tanto Carlos Chamorro desde fuera con sus palabras como nosotros mismos desde abajo logramos que la cuadrilla se viniera arriba, conseguimos animarnos y recuperar las fuerzas de la cuadrilla. La revirá se hizo eterna y terminó justo cuando terminó la marcha (12 minutos de “Amarguras” en versión larga), arrancando con fuerza en dirección a Carrera Oficial. El aplauso de los que se encontraban en las Ocho Puertas fue largo y muchos los “vivas” dedicados a la Virgen por los linarenses que supieron reconocer el esfuerzo de la revirá. Como alguien dijo en ese momento “¡aun no hemos entrado en Carrera Oficial y ya hemos puesto Linares boca abajao!”.

¿Cómo fue la primera vez que te metiste debajo? Fue en el año 1989, con 15 años, en un ensayo, después de salir el paso de las cocheras de la calle Navas, donde la Hermandad guardaba la parihuelas. No recuerdo mucho de cómo fue mi primera chicotá, aunque si recuerdo que iba incomodo, supongo que sería por no estar habituado a ese tipo de trabajos.

Un buen costalero es… Hace mucho tiempo aprendí que un costalero solo tiene que hacer 3 cosas nada más: achuchar pa’lante, empujar pa’rriba y apretar los dientes.

El costal ¿por debajo o por encima de las cejas? ¿Por qué? Hace ya varios años me enseñaron a hacerme la ropa gente con muchos años de oficio debajo de los pasos y me explicaron en su momento que el costal es una palanca y que de su correcta posición depende que trabajemos correctamente. El costal al ser una palanca el lugar donde aplica la fuerza es la morcilla sobre la trabajadera y el punto de apoyo que se utiliza para ejercer la palanca es la visera del costal sobre la frente. Todas las cabezas no son iguales y aunque el lugar más común para colocar para colocarse la visera del costal son las cejas cada costalero debe probar diferentes posiciones, ligeramente por encima o por debajo de las cejas, para ver cual es su posición correcta para que el trabajo no quede ni muy arriba ni muy abajo, si no sobre el punto exacto. Por supuesto ni bajándoselo hasta la nariz, ni dejándoselo por mitad de la frente. Hay que concienciarse de la importancia de hacerse bien la ropa.

¿Un pregon? El Pregón de la Semana Santa que pronunció Ramón Martín Aguayo, principalmente por la carga emocional que tuvo para mi. Ese pregón lo disfrute mucho.

¿Una marcha de palio? La Madrugá, de Abel Moreno. No es un compositor que me agrade mucho pero esa marcha es una obra de arte se mire por donde se mire.

¿Una banda de música? La Banda de Música de Manuel Garín, porque han sido muchos años tras el palio del Mayor Dolor y llegamos a tener mucho compenetración la banda con la cuadrilla.

¿Lo mejor y lo peor del mundo del costal? Lo mejor de este mundo el compañerismo y la amistad que surge debajo de los pasos y que luego tiene su prolongación en la vida cotidiana. Se logran crear vínculos muy fuertes entre compañeros de trabajadera y de ahí surgen grandes amistades que muchas veces perduran a través de los años. Lo peor de este mundo son los protagonismos mal entendidos, cuando el costalero no debe tener ningún tipo de protagonismo, o la soberbia de los que llevan cuatro días y se piensan que lo saben todo y piensan que nadie les puede enseñar ya nada, cuando el costalero siempre puede y debe seguir aprendiendo.

¿Un ejemplo a seguir? Ramón Martín Aguayo. Como costalero tiene una capacidad de trabajo enorme, honesto y que nunca se esconde en los momentos difíciles. Como nazareno es de los que siempre ha estado trabajando por su hermandad y contagiando a los demás su sentir nazareno. Y como cofrade no voy a ser yo quien lo descubra, su magnífica labor al frente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías lo dice todo.

Un paso de palio ¿siempre de frente o con cambios? Depende de cada palio y del estilo de cada hermandad, pero en general los palios siempre de frente, siempre ganando terreno, a veces se alarga el paso más o menos según lo pida la música, pero siempre de frente. Un palio con cambios tiende a descomponerse.

¿Qué edad crees que es la idónea para retirarse de los pasos? No creo que haya una edad concreta, ni un límite de años. He conocido gente que ha estado debajo de los pasos más de 40 años y otros que 5 años ya no podían. Es lo que decíamos antes, hay que tener interés por aprender el oficio bien. Si uno se preocupa por llevar la ropa bien, por tener las posturas correctas debajo del paso, etc., un costalero puede disfrutar muchos años.

¿Cómo fomentarías que la gente le pierda el miedo a meterse de costalero? Hay que partir de la base de que no todo el mundo vale para ser costalero. Si a alguien le gusta este mundo y cree que está capacitado pero no se decide lo que tiene que hacer probar directamente, que procure rodearse de gente que le pueda enseñar bien, que aprenda bien desde el principio, porque si desde el principio hace las cosas bien disfrutará mucho mas de los pasos. El mundo del costal y la trabajadera engancha.

¿Las hermandades de Gloria ayudarían? ¡¡LAS GLORIAS AYUDARÍAN MUCHO!! Me sorprende mucho que en Linares no haya más hermandades de gloria, porque de esa forma habría movimiento costalero todo el año, se fomentaría mas el interés por el oficio, serviría de base para que la gente se iniciara y fuera aprendiendo, y seguramente se acabaría con la recurrente amenaza de la falta de costaleros que hay cada año.

Una Madrugá da para mucho ¿Qué cosas pasan por tu cabeza durante esas horas? Por mi cabeza pasa de todo. Uno piensa en la familia, los amigos, la gente que te rodea, las cosas que pasan a lo largo de la vida, el recuerdo de anteriores Madrugás… pienso en todo porque hay mucho tiempo para pensar. También estoy concentrado en el trabajo, por supuesto.

¿Qué tiene la cuadrilla del Mayor Dolor que la hace distinta a las demás? Principalmente el grupo humano que la formamos, más que una cuadrilla somos un grupo de amigos que no solo estamos en contacto en los ensayos y en Semana Santa, si no que nos vemos durante todo el año la gran mayoría de los componentes, salvo la gente que vive fuera, claro está. Cualquier nueva incorporación se integra desde el primer momento y esta unión es la base del trabajo que realizamos, porque nos duele nuestra Madre, nuestra Hermandad y también los costaleros que trabajan a nuestro lado cada Madrugá. Y el principal responsable de que estemos tan unidos es Nicolás Hidalgo, actual capataz, que ha sabido integrarnos a todos y crear un excelente ambiente entre los miembros de la cuadrilla, que hace que estemos realmente a gusto cuando trabajamos.

Los costaleros ¿piensan más en la estética o en el trabajo? Hay de todo, hay los que piensan en hacer bien su trabajo y hay otros que solo se preocupan de la estética y de salir guapos en las fotos. De todas formas no hay que confundir a los que se preocupan de la estética con los que buscan la comodidad para trabajar.

¿Alguna manía antes de salir en el palio del Mayor Dolor? Desde primera hora del Jueves Santo preparo la ropa como si fuera un torero, de hecho cuando me visto lo hago de forma ritual, lo mismo que un torero. Siempre soy el último en meterse debajo del paso antes de la primera chicotá y el último en salirse después de la última.

¿Un recuerdo de la infancia? Recuerdo muy nítidamente el palio de la Virgen del Rosario encerrándose en la antigua Casa de Hermandad de la c/ Republica Argentina, ahora Hermanos Costaleros. Por supuesto también recuerdo las mañanas de Viernes Santo en las que despertábamos con los tambores de la Banda de Cabecera del Nazareno.

¿De dónde te viene la pasión por la Semana Santa? ¿Qué es para ti? En mi casa no ha habido tradición por la Semana Santa, sin embargo desde muy niño me ha gustado. Siempre he sido muy curioso y el hecho de saber como eran las cofradías por dentro también me llevo a ir introduciéndome poco a poco en las hermandades.

¿De dónde te viene la pasión por la trabajadera? ¿Qué es para ti ser costalero? Supongo que la misma curiosidad que me llevo a introducirme en las cofradías me llevó también a ser costalero, pues ya desde pequeño sentía mucha curiosidad por este mundo y quería saber como era. Ser costalero es, como se suele decir, una forma de vida. Uno no es costalero solo debajo del paso. Hay que saber llevar y aguantar los kilos de la vida y a veces también hay que ayudar a los demás a sobrellevar las cargas entre todos.

¿Qué le dirías a las personas que están indecisas por salir? Hay que probar, hasta que no lo pruebas no sabes si te gusta o no. Si no gusta no pasa nada, pero conozco a mucha gente que no quería probar porque no se veían de costaleros y llevan ya muchos años dando chicotás. Realmente no recuerdo a nadie que haya probado y no le haya gustado. Como ya he dicho antes los pasos enganchan.

Si no salieses de costalero ¿dónde irias? Seguramente iría de penitente con cruz junto a mi Señora, pues también me hace ilusión vestir la túnica de mi Hermandad, aunque en estos años también me llama la atención ser legionario nazareno. Aunque supongo que al final estaré donde la Hermandad me necesite.