Desde que nos recibiera nuestra Reina en su Casa, allá por el mes de Diciembre, los que nos acercábamos a rendirle pleitesía comenzábamos ya a sentir que nuestro sueño estaba cada vez más cerca.
Ahora, cuando ya estamos más próximos a esa gran noche, el reloj parece marcar cada vez más despacio las horas, el tiempo transcurre más y más despacio, y la impaciencia nos puede por verla entronizada en su Altar de su Reino.
Sus hijos volvimos a cumplir con nuestra promesa, volvimos a añorarla en las largas noches de ensayo, en cada chicotá la imaginábamos tan bella, en cada levantá la sentíamos tan cerca y en cada revirá la soñabamos tan sublime como solo nosotros, sus costaleros, podemos imaginarla. Ya no quedaba más espacio para la imaginación, que de tanto soñarla tan hermosa se nos agotó la memoria, y ahora ya contamos lo que nos queda para coger esa nacarada Mano que tiempo atrás nos dió a besar y llevarla de paseo por las calles de su Reino y sentir, junto a Ella, el Mayor Dolor.
Ahora mas que nunca vuelve a tener vigencia el manido tópico de "Dejaremos de soñar lo vivido para comenzar a vivir lo soñado".
Y además de verdad, desde el 4 de Febrero que comenzó a convertirse nuestro sueño en realidad, no he dejado de pensar en ella cada Viernes de peoná en cada una de las chicotás, al igual que todos.
ResponderEliminarNos gusta el costal mucho, gracias a Dios este año hemos aprendido y mejorado muchas cosas, pero siempre siempre siempre pensando en Ella.
Felicidades Diego porque te has currao el relato, los costaleros siempre viviendo de los recuerdos.
Ole los costaleros Bohemios¡¡¡
Bien dicho Jesús !!!
ResponderEliminarEste Diego es un artista, siempre me ha gustado lo de "revirá".
Y si que pasa lento el tiempo y para mí que estoy fuera más lento, pero ya queda menos...
Un abrazo desde Murcia